Capítulo 7 "El Consultor Interno"

En principio les comento que no he tenido experiencia como consultor interno, sin embargo al leer el capítulo en la parte donde habla del tipo de contrato triangular o rectangular recordé que en su momento como Contador externo, ciertamente tuve varias dificultades ya que yo trataba con el Director General de una empresa, sin embargo quien realmente tenía la última palabra era su papá y desgraciadamente no era factible hablar con él y mucho menos explicarle en persona los pormenores de la situación que se trataba, creo que si yo hubiese tenido conciencia acerca de este tema hubiese puesto mayor énfasis en tratar de tener alguna entrevista con él para saber cuales eran sus inquietudes y su punto de vista y así tratar de llegar a un mejor acuerdo; ya que realmente lo que pasó entonces, fue que "me sentía remando contra corriente constantemente" y eso me resultó muy desgastante y frustrante.

Algo que me llamó la atención es que en el cuadro de diferencias entre el consultor interno y externo, en ambos casos existe la preocupación por ser ignorado, rechazado o tratado sin importancia y sin embargo el consultor interno anhela la variedad y la libertad del externo, y  a su vez éste, desea la continuidad y estabilidad del consultor interno. Creo que ambas facetas del consultor tienen tanto sus ventajas y desventajas y algo que es fundamental en ambos casos, es que se aclare desde un principio cuales son las espectativas, lo que esperan, como se sienten y a lo que se comprometen tanto los jefes del consultor y del cliente, como el consultor mismo y su cliente, para así evitar conflictos posteriores.